Desde chamaco he estado conmocionado con los cómics, la fantasía y las caricaturas.
En aquellos años donde rifaban las PEPSI cards y todo mundo estaba conmocionado por cambiar corcholatas por tarjetas coleccionables de sus superhéroes favoritos, yo, no conforme con las PEPSI cards hice mis propias tarjetas coleccionables, únicas y limitadas.
Claro era mucha chamba por que eran artesanales, así que sólo hice una.
El único ejemplar existente de 1995, la tarjeta valuada en unos dos millones de pesos, la tarjeta del único, original y asombroso Hombre Tornado, de los Radioactivos.
La tarjeta, que por cierto no está a la venta... bueno, tal vez si... Está echa sobre una tarjeta reciclada del Dr. Destino (coincidencia o destino) de las Pepsi Cards.
Hermosamente decorada con papel aluminio sacado de una envoltura de Chocolate Carlos V, diamantina de papelería roja y un asombroso dibujo pegado con Pritt, en papel bond coloreado (si señor) a mano con prismacolor y entindado con espectacular pluma Bic negra (recordemos que en la primaria, cuando hice esto, no te dejaban usar pluma, sólo lápiz, entonces eso lo hace más mágico aún).
La guardo y la conservo como un gran tesoro en mi corazón, por que aparte la he cuidado como si en serio fuera la tarjeta coleccionable más cara, más hermosa y más rara de todo el mundo.
Para más información de los Radioactivos visita los proyectos en www.mundodaki.com
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