A veces, el proceso de creación de un libro se puede ver algo raro, digo y si no me creen, solo chequen los bocetos de un dibujante llamado Joe Quesada en la 5a imagen de abajo, noten la cantidad de trazos que generó en la búsqueda de cada resultado, eso es porque él, en su mente (como una especie de meditación activa) está decidiendo donde poner los diferentes miembros del humano que está dibujando.
Por último decide el lugar basándose en "donde el ojo lo va a disfrutar más". De esta manera puede tener una idea más certera de lo que va a hacer al momento de DIBUJAR.
DIBUJAR es un proceso que consta de varias partes. En este caso, yo, los trazos que tiene Joe Quesada en busca de la figura perfecta, yo los hago de una sola intención con pluma sobre papel blanco. Me quedan mal, lo sé, pero no me importa, porque estos son mis garabatos.
Es decir. El proceso del dibujo, lo vas a decidir tú. Lo vamos a decidir cada uno de nosotros. El dibujo es un proceso mental experimental que sucede cada vez que tomas una pluma y una hoja. Los niños no le tienen miedo. Los adultos sí. Recordemos entonces, a nuestro niño.
El proceso a veces se puede ver tan raro como las imágenes a continuación, quien pensaría que son las próximas páginas de mi nuevo libro El País del Sol.
Ustedes entienden??? Bueno... yo sí, y eso es lo importante. Igual que la vida.
En el proceso mental que representa el dibujo, hay sólo lugar para el miedo controlado.
Así como yo layouteo estás páginas, layouteo mi camino.
Cada viñeta pide un proceso diferente.
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